Incubadora CON VALORES y la Universidad: una colaboración necesaria
¿Puede la Universidad convertirse en un apoyo a los nuevos emprendedores?
Esta es la pregunta que nuestro equipo y mentores se hizo cuando se inició este fascinante proyecto que trata de empoderar a personas en riesgo de exclusión social dotándolos de las herramientas para labrar su propio futuro. ¿Es posible una Universidad CON VALORES?
La respuesta nos llegó no mucho más tarde cuando iniciamos el primer proyecto de colaboración entre la Incubadora inclusiva CON VALORES y el CEU- Universidad Cardenal Herrera.
¿Queréis saber qué surgió de esta unión?
La Universidad Con Valores colabora con nuestrxs mentorizadxs:
La idea de iniciar esta colaboración nació del presidente de la Incubadora CON VALORES, Melquiades Lozano. Él mismo nos lo cuenta:
A principios de Mayo, le propuse a una buena amiga, Cristina Ventura, Responsable de CEU Emprende, poner a trabajar a sus alumnos en favor de la problemática de las personas sin hogar. ¿Cómo? Muy sencillo: dentro de la asignatura de Innovación y Emprendimiento, sus alumnos participarían en el desarrollo de la Asociación CON VALORES y analizarían posibles modelos de negocio reales, aplicables a las capacidades de estos colectivos vulnerables. Dicho y hecho, llevamos dos sesiones y seguimos hasta finales de Junio.
Creo que con este tipo de colaboraciones todos ganamos, la Universidad refuerza su nombre colaborando con causas solidarias. Los alumnos entran en contacto con una problemática social que quizás nunca hubieran conocido y esto los forma también en valores y las personas sin hogar tienen a 20 alumnos pensando en su problemática y como resolverla (o por lo menos aportando su granito de arena).
Como anécdota contaré que Cristina me pidió que el primer día hiciéramos una performance para impactar a los alumnos. Me la contó y me pareció buena idea… ¿Cuál era? Me pidió que acudiera vestido de traje, corbata, zapatos y con todo el equipaje que muchos de los que estáis leyéndome conocéis. Ya sabéis, el pack del ejecutivo, que yo también tantos años he llevado.
Les empecé a contar mi experiencia profesional con grandes empresas, grandes facturaciones, etc. etc.… intentando trasladarles la imagen de hombre empresa 100%. Una vez hubiera acabado, me pidió que me quitara la corbata, la chaqueta y la camisa y me quedara con una camiseta y les contara “mi otra vida” como voluntario con personas sin hogar y mi nuevo proyecto con la Asociación CON VALORES.
Fue genial ver sus caras con el cambio de imagen. Creo que también sirvió para que entendieran que es posible compatibilizar el mundo empresa con iniciativas sociales.
